No podemos dudar que Microsoft está haciendo un gran trabajo en una de las secciones más importantes de su extensa compañía: Los videojuegos. La empresa de Bill Gates ha conseguido crear en los últimos años una familia de consolas cuya progenitora principal fue Xbox One. A partir de ahí, nacieron dos consolas más, capaces de adaptarse a las exigencias del público. La primera de ellas llegó en formato reducido llamándose Xbox One S, y la segunda de ellas llegó para posicionarse como la plataforma más potente del mercado hasta la fecha: Xbox One X.
La familia de Xbox puede sacar pecho, orgullosa, por numerosos motivos. Una gran biblioteca de videojuegos retrocompatibles, el sistema de juego de Xbox Game Pass, que entre otras ventajas, permite a los usuarios disfrutar de un gran número de títulos, independientemente del dispositivo en el que se jueguen… En términos de videojuegos exclusivos, la compañía no se queda atrás tampoco, pero sí que es cierto que no encontramos tanta variedad como nos gustaría.
Aun así, los juegos exclusivos de Microsoft derrochan calidad allí donde van y hemos tenido el placer de poder analizar la última gran apuesta exclusiva que llega a la familia de Xbox One. Se trata de Forza Horizon 4, el nuevo capítulo de la saga de conducción Forza Horizon, que llega con un grandísimo entramado de características, las cuales podrán disfrutar sus usuarios a partir del próximo 2 de octubre.
Forza Horizon 4: Todo el contenido que te puedas imaginar
La saga Forza Horizon ya ha dado a la luz a 4 juegos diferentes desde el pasado año 2012. En aquel entonces, nació este derivado de la franquicia Forza Motorsport, la cual llevaba protagonizando, junto a otros títulos, la biblioteca de juegos exclusivos de las consolas de Microsoft. La velocidad y las plataformas de Xbox siempre han ido de la mano gracias a esta saga, y fue en 2012 cuando Turn 10 Studios y PlayGround Games aunaron fuerzas para lanzar al mercado este sucedáneo del conocido simulador de carreras Forza.
Si por algo se caracterizan los juegos de la saga Forza Horizon es por un componente fundamental que ha perdurado a lo largo de los 4 juegos que tiene la saga: La mezcla entre un juego de conducción sumergido bajo un mundo abierto. Y es que los jugadores tienen, y han tenido, total libertad para moverse por los bastos escenarios que nos proponía cada juego de la franquicia, completando carreras y desafíos para ir acumulando puntos e ir así mejorando como conductores, y rellenando el garaje con nuevos vehículos.
La base que sigue Forza Horizon 4 es la misma que hemos visto en años anteriores, pero tras 6 años de evolución, esta mecánica ha cambiado, mejorado y se ha visto incrementada en contenido y sobretodo en profundidad. Tras haber pisado el acelerador durante horas y haber probado todas sus características, diría sin miedo a equivocarme, que nos encontramos ante uno de los juegos de conducción más grandes que hemos visto hasta ahora.
Y es que Forza Horizon 4 no ha escatimado en ningún apartado de su contenido. Empezando por su amplio garaje de coches, compuesto por más de 450 vehículos de base, y llegando hasta todas las posibilidades jugables que ofrece el título, nos encontramos ante un juego de conducción, alejado de cualquier tipo de simulación, que precisará de incontables horas para poder exprimirlo al máximo.
Para empezar, tenéis que saber que el nuevo capítulo de la saga Forza Horizon no ofrece un modo historia como tal. Creamos a nuestro piloto y directamente nos ponemos al volante de un coche. Empezamos a familiarizarnos con los controles en lo que parece ser un tutorial introductorio y de repente pasamos de estar conduciendo bajo los árboles de hojas marrones en una tarde de otoño, a derrapar por unas carreteras heladas comandadas por unos gélidos entornos nevados. Minutos después el hielo y el color blanco dan paso a un escenario primaveral, en el que conduzco un potente rally a través de unos verdosa montaña, para concluir conduciendo a 37 grados bajo el sol en una calurosa mañana del mes de julio. Señoras y señores, bienvenidos a una de las principales novedades de Forza Horizon 4: Su ciclo estacional.
Y es que los chicos de Turn 10 Studios y PlayGround Games han estado trabajando muy duro para ofrecer un entorno con un nivel de dinamismo llevado al límite. De esta forma, los jugadores podremos disfrutar del amplio escenario que se nos propone en Forza Horizon 4 de 4 maneras distintas: En primavera, en verano, en otoño y en invierno.
Cada estación, ofrece una serie de características y recursos visuales y estéticos diferentes, pero esto no es todo, porque evidentemente, las condiciones de las carreteras y caminos, según la estación en la que nos encontremos, también afectará a la jugabilidad de los vehículos.
En este sentido, si nos encontramos en verano, no tendremos prácticamente ningún problema para tomar curvas, acelerar, derrapar y adelantar a nuestros enemigos. En cambio, si la carretera está llena de nieve, agua o hielo gracias al poder del otoño o del invierno, tendremos que llevar muchísima precaución al volante, o podremos salirnos de la pista antes de que podamos reaccionar.
Ya que estamos, vamos a indagar más en el sistema jugable que propone Forza Horizon 4. Las mecánicas de control no difieren mucho de su antecesor Forza Horizon 3. El esquema de controles es exactamente el mismo, por lo que, si sois jugadores habituales de los juegos de conducción o de la saga Forza Horizon no tendréis ningún problema y os llevará tan solo unos minutos dominar el juego. Como hemos dicho, esta versión más desenfadada de la saga Forza Motorsport, se aleja de las mecánicas simuladas para dar paso a una versión mucho más desenfadada y gamberra, en la que la diversión al volante prima por encima de la precisión.
Diría, que estamos ante uno de los escenarios más grandes de toda la saga de Forza. Dejamos atrás las tierras australianas que pudimos disfrutar en Forza Horizon 3 y damos un gran salto geográfico hasta llegar a Gran Bretaña. Ante nosotros, tenemos un entorno vivo y gigante poblado por más de 500 carreteras por las que podremos conducir desde los primeros minutos de juego.
No hay tiempo para aburrirse
Empezamos a disfrutar de nuestra libertad y van apareciendo las primeras pruebas y desafíos que tendremos que completar para seguir creciendo como pilotos. Antes de cada prueba, los jugadores tenemos la ocasión de ajustar distintos parámetros como por ejemplo los reglajes del coche y la dificultad del juego.
Conforme pasan las horas, las pruebas que podremos completar van aumentando su número y diferenciamos distintos tipos de desafíos: Carreras de asfalto, de tierra, carreras callejeras, careras de campo a través… Cada una de ellas ofrece unos desafíos para el jugador, un tipo de condiciones bajo las que correr, una clase de vehículos diferentes. El inconveniente que podemos sacar a relucir bajo este parámetro, es que las pruebas a lo largo del juego pueden pecar de ser un tanto repetitivas. Aun así, este factor se ve suplantado por el grandísimo número de desafíos diferentes que nos encontraremos en el escenario, por lo que será muy difícil aburrirse.
Además, el hecho de que el clima sea dinámico y vaya cambiando a lo largo del juego, es un factor que se agradece, y que además enriquece mucho el título, pues dependiendo de las condiciones climatológicos, los coches se conducen de una forma o de otra.
Al ir completando dichas pruebas, los jugadores obtendremos dos tipos de puntuaciones diferentes. En primer lugar, los conductores recibiremos puntos de crédito, con los cuales podremos obtener nuevos vehículos en el garaje, además de otros objetos que ya mencionaremos más adelante. Como os hemos comentado con anterioridad, tenemos más de 450 vehículos de base en Forza Horizon 4.
Las marcas, los modelos y los tipos de coches y vehículos brillan por una variedad desmesurada y los jugadores que quieran obtener cada uno de estos vehículos se enfrentarán a centenares de horas de juego sin ningún tipo de duda. Cabe destacar también que los vehículos se dividen según su rareza en: Frecuente, exclusivo, épico y legendario.
Por otro lado, también iremos ganando reputación como pilotos, lo cual se deriva en el desbloqueo de numerosas pruebas, desafíos y eventos de exhibición que podremos ir completando, dependiendo de la estación en la que nos encontremos, así como de nuestro nivel de reputación.
Como veis, a nivel de contenido, nos encontramos con uno de los juegos de conducción más grandes que hemos visto nunca.
No todo va a ser conducir…
Ahora, giramos la llave, apagamos el motor y bajamos del coche, ya que me gustaría hablar de varias mecánicas, que en menor medida, también forman parte del juego. La primera de ellas sería el sistema de rebobinado. Si tenemos un fallo de conducción, un choque, o cualquier tipo de contratiempo, podremos volver atrás como si nos encontráramos en Prince of Persia: Las Arenas del Tiempo. Así, podremos repetir el tramo en el que nos hemos equivocado. Esta mecánica la llevamos viendo durante varios años en distintos títulos (también de la competencia), y es un factor más que facilita la jugabilidad de Forza Horizon 4.
Dentro del apartado de jugabilidad, pero todavía fuera del coche, nos encontramos con un apartado de personalización de lo más completo. A través de distintas viviendas repartidas por el escenario, que iremos obteniendo para nuestro personaje a lo largo del progreso jugable, podremos acceder a una página de estadísticas, donde de forma gráfica, podremos ver nuestros avances en el título. En nuestra casa, también tendremos acceso al sistema de personalización.
En este sentido debemos destacar que podremos modificar la apariencia de nuestro piloto, a excepción de los rasgos faciales. Así, podremos elegir la ropa y los complementos que queremos que nuestro protagonista lleve encima, dentro de un amplio abanico de posibilidades predeterminadas, para marcar así, en mayor o menor medida un estilo de moda propio.
Por otro lado, también tendremos ocasión de modificar la apariencia de nuestros vehículos gracias a un completo sistema de personalización visual. Desde cambiar el color del coche, hasta modificar el claxon y su matrícula, este apartado es de los más completos que recuerdo en un juego de conducción, algo que permite a los jugadores dotar de personalidad y estilo el nuevo Forza Horizon 4.
¿Y qué pasa con las antiguas cajas de suministro de Forza Horizon 3?
Hace unas semanas, se confirmó la noticia de que Forza Motorsport 7 eliminaría las cajas de suministro del juego, y que tampoco se añadirían en el nuevo episodio de la saga Horizon. En este sentido, Forza Horizon 4 no dispone de las famosas cajas de botín, pero sí que cuenta con una mecánica parecida. Se trata de una ruleta de la fortuna, la cual está regada de diferentes premios: Desde puntos de influencia hasta vehículos completos, tendremos la oportunidad de girar esta ruleta (bautizada como Horizon Wheel Spin), para poder optar a diferentes objetos por puro azar.
Para terminar con el apartado de jugabilidad, me gustaría destacar que el juego se siente muy fluido y dinámico a nivel general. He tenido la suerte de poder probarlo en una Xbox One básica (la primera que llego al mercado de hecho), y el título rinde sin ningún tipo de problema. A nivel técnico, el juego mejorará mucho en una Xbox One X y visualizado en una pantalla 4K con función HDR, (de la cual puede disfrutar el juego), pero aun así, la jugabilidad es una delicia en todos los sentidos.
A nivel de contenido puede resultar abrumador en numerosas ocasiones, teniendo demasiadas carreras y desafíos por completar, pero con paciencia, iremos desbloqueándolos poco a poco, disfrutando no solo de la experiencia frenética que ofrece Forza Horizon 4, sino también de su amplio nivel de profundidad y variedad en todos los sentidos.
Gracias a todos estos apartados, Forza Horizon 4 puede ofrecer a sus jugadores centenares de horas de juego. Su profundidad es uno de los apartados más impresionantes para tratarse de un juego de conducción. Estas horas, se pueden ver ampliadas en número gracias a la modalidad multijugador que también ha brillado en otras entregas. Por desgracia, cuando probamos el juego en su versión final, los servidores todavía permanecían cerrados, por lo que no hemos podido probarlo en la manera que nos hubiera gustado.
Aun así, pensamos que, si la comunidad de jugadores se involucra y aprovecha todo lo que la desarrolladora nos ha puesto entre manos, la vida de Forza Horizon 4 se podría alargar durante años sin ningún tipo de duda. El número de eventos, desafíos y carreras que poder compartir con jugadores de todo el mundo es inmenso, y la experiencia jugable se puede ampliar otro centenar de horas como mínimo.
La velocidad a flor de gráficos
Desde hace varios años, el nivel del apartado técnico de la saga de conducción Forza ha destacado de una manera sobresaliente. Forza Horizon 4 ha vuelto a superar la barrera del trabajo bien hecho por parte de PlayGround Games y Turn 10 Studios ofreciendo a los jugadores una experiencia visual que no escatima en recursos, ocasionando un estallido de calidad en todos los sentidos.
El nivel de detalle de los escenarios está trabajado y mimado de una forma increíble, más todavía si tenemos en cuenta el ciclo estacional que protagoniza el juego en términos visuales. El sistema de destrucción del juego también ha recibido horas y horas de trabajo, dando como resultado una riqueza de detalles abrumadora.
Aun así, debemos destacar un pobre sistema de colisiones. Sabemos que el juego brilla por su frenetismo y por su alocado y rápido sistema de conducción. Por tanto, el buen estado de nuestro coche no es un factor que haya que tener en cuenta a la hora de conducir. Pero a pesar de esto, echamos en falta más detalles visuales a la hora de colisionar con otros vehículos o con elementos del escenario. De hecho, podemos llegar a una prueba con nuestro coche destrozado y mágicamente se arregla antes de su inicio. Entendemos el hecho de no dar importancia a la verosimilitud del buen o mal estado del coche, pero a nivel visual, se podría haber trabajado más en este apartado.
Sin duda alguna, el apartado gráfico sobresale gracias a una modalidad cada vez más frecuente en muchos videojuegos: El modo foto. Y es que Forza Horizon 4 aprovecha las bondades de su motor gráfico, ofreciendo un modo foto a sus jugadores para que puedan sacar espectaculares capturas. Tenemos que decir que es un modo con un gran número de posibilidades para los usuarios más exigentes y que las alternativas que ofrece su cámara son muy variadas. Os dejamos con las mejores capturas que hemos realizado del juego:
En el aspecto sonoro, lo que más destaca del juego es su potente banda sonora. Los conductores tendremos distintas emisoras de radio en nuestros coches entre las que poder naufragar para elegir las canciones que queremos que nos acompañen en nuestras travesías automovilísticas. La variedad vuelve a brillar en este apartado en la selección de canciones, encontrando pistas musicales de la talla de The Killers, Marshmello, M83, MGMT o Kendrick Lamar entre muchos otros.
Forza Horizon 4 ha conseguido dar un paso más adelante y elevar un peldaño más arriba la saga de conducción exclusiva de Microsoft. Volvemos a repetir que nos encontramos ante un juego de conducción de un tamaño soberbio, ya no solo a nivel de contenido, sino también a nivel técnico. La experiencia y el buen trabajo de Microsoft junto a Turn 10 Studios y PlayGround Games, ha quedado patente de nuevo, en un juego que disfrutarán los amantes del género y que sabrá cautivar a los conductores nóveles con su L pegada en la luna trasera del coche. Un imprescindible si tienes una Xbox One en casa. Pura calidad.
Hemos podido elaborar el análisis de Forza Horizon 4 gracias a una copia digital ofrecida por Microsoft.
- 0 Comentarios
- Análisis, Analisis Videojuegos, Xbox One
- 25 septiembre, 2018
- Forza Horizon 48.5Valoración Final
- Historia
- Jugabilidad
- Gráficos
- Sonido
- DESTACAMOS
- Su profundidad y variedad.
- Sus más de 450 vehículos.
- Su apartado técnico.
- A MEJORAR
- Algunos desafíos son repetitivos.
- Pobre sistema de colisiones.
- Algunos coches son muy dificiles de conseguir.