Análisis de Atelier Lydie & Suelle: The Alchemists and the Mysterious Paintings

Es posible que no os suene esta serie de videojuegos, pero os aseguramos que viene de largo. La serie Atelier es una saga de videojuegos desarrollada por Gust Corporation desde 1997. Cuenta entre sus filas con juegos para multitud de plataformas, por no decir todas, habiendo visto lanzamientos en PlayStation 2, PlayStation 3, Game Boy Advance, Nintendo DS y un buen puñado más.

Este tipo de videojuegos son los llamados «de nicho». Se encuentran dirigidos a un público muy específico, pero son «muy cerrados» al exterior. O te gusta o no, así de simple. El género JRPG tiene estos pros y contras, y si encima tiene estas características más aún.

Atelier Lydie & Suelle: The Alchemists and the Mysterious Paintings es la decimonovena entrega de la saga, que se dice pronto. Su lanzamiento fue oficial en Japón el pasado mes de diciembre para PlayStation Vita y PlayStation 4, y ya está disponible en occidente para PlayStation 4, PlayStation Vita, Nintendo Switch y PC.

La alquimia como punto de partida

La alquimia ha estado muy presente en muchos títulos de este género. Muchos conocen este arte de la mano de Full Metal, un manganime de grandísima calidad que desde aquí os animo a descubrir. Pero no nos desviemos.

Nos encontramos en el Reino de Adalet, más concretamente en la ciudad de Merveille. Dos hermanas, Suelle y Lydie Marlen, inseparables y mejores amigas, trabajan y estudian juntas. Su sueño: convertir su laboratorio de alquimia, su atelier, en el mejor del reino. No lo tendrán fácil, ya que su padre Roger no les puede proporcionar el entrenamiento necesario para mejorar, debiendo aprender la alquimia de forma autodidacta.

Por si fuera poco, en Merveille se encuentra el atelier de Lucía, uno de más destacados del reino. Es el mejor de la ciudad, ya que aglutina los mejores productos y el mayor número de clientes. Lucía es la «rival» de las hermanas ya que les priva de sustento y frena su progreso, y además saca pecho delante de ellas.

Dos puntos de inflexión cambiarán las vidas de nuestras dos protagonistas. El primero de ellos es la aparición de Ilmeria, una gran alquimista que les ofrecerá entrenamiento alquímico y lecciones sobre la combinatoria elemental. La segunda es un cuadro misterioso del cuarto de su padre: las hermanas entrarán dentro de éste llegando a un mundo maravilloso repleto de materiales alquímicos de una rareza sobrenatural.

La ambientación del juego va muy acorde al género

En Atelier Lydie & Suelle, nos encontramos con un JRPG, con formato de imágenes tipo manga/anime y una banda sonora acorde al género. Tiene todos los ingredientes tradicionales de un juego clásico. De hecho, cuesta mucho no caer en la comparación de éste título con sagas como por ejemplo la de «Tales Of».

Lo primero que destaca del juego es el apartado artístico. Una paleta de colores vivos, ya sea en la ciudad o en las localizaciones externas, hace brillar al título. El diseño de los personajes no se queda atrás, y es que están cargados de todo lujo de detalles. Incluso, en mi opinión, demasiado recargados y demasiado vistosos en algunas ocasiones, detalle que no quiere decir que sea malo. Los trajes son pomposos y ostentosos. Aún con todo esto parece que se ha estancado en este estilo: es cierto que la estética manga es así, pero gráficamente se podría exigir bastante más.

La banda sonora suena bien. Muy bien. Y es que el apartado musical es realmente notable en muchas de sus canciones, en contraposición de piezas musicales más genéricas. No obstante, en el atelier, podremos seleccionar todas las pistas y escucharlas detenidamente.

El combate y la alquimia por bandera

Si en algo destaca este juego es en dos cosas, el sistema de combate y el sistema de alquimia.

El primero de ellos es algo recurrente en todo este tipo de juegos. Luchas en espacios cerrados y por turnos simples. Nada nuevo bajo el sol, pero que resuelve bien y gusta. En el transcurso de la aventura por los parajes de Adalet veremos diversas criaturas a nuestro paso. Pueden atacarnos ellas primero, comenzando con ventaja, o podemos sorprenderlas, golpeándoles y adquiriendo nosotros la iniciativa. En cualquier caso, accederemos a la pantalla del modo de combate. Una línea lateral en la zona derecha de la pantalla marcará la línea temporal de las batallas y los turnos a seguir, colocando a nuestras valientes amigas (además de los compañeros que se nos unan), y a los monstruos en ella. Cuando la barra vaya avanzando, le irá tocando a los diferentes personajes disponibles.

En nuestro turno tenemos varias opciones. La primera es el ataque simple, en la que nuestro personaje atacará con su arma sin complicarse demasiado. La segunda opción es el uso de habilidades especiales, marcadas por el nivel del personaje y la barra de MP. Estas gastan un determinado número de puntos MP por activarse, siendo más poderosas cuando más MP gasten. También podremos defendernos o utilizar diferentes objetos. Por cierto, cuando salgáis de la ciudad no os olvidéis de equiparos los ítems que queráis llevar: no se guardan de forma automática, debiendo planificar cada salida que queramos realizar.

La parte alquímica es bastante completa y algo complicada en los compases iniciales. Las combinaciones son sencillas, mezclando elementos, siguiendo las recetas, pudiendo fabricar tanto explosivos como elementos curativos, etc. El problema viene cuando queremos crear un elemento «de nivel». Si quieres un utensilio que se aleje de la norma deberás tener en cuenta el orden de adición de los ingredientes, la posición de estos en la marmita, etc. Dicha posición viene representada por un cuadrante de colores en el que cada material ocupa casillas de una forma u otra, con colores según lo que represente.

Las misiones y la historia

Un JRPG, como bien sabéis, presenta multitud de contenido. En Atelier Lydie & Suelle ésto no cambia, ni mucho menos. Las misiones de la historia nos llevarán por diversas zonas del reino en busca de materiales y luchas con monstruos para ir mejorando en los rankings de los atelier de alquimia. El día a día de Sue y Lydie se irá compaginando con las entradas al mundo paralelo de los cuadros, los cuales tienen su historia detrás.

Por otro lado, tenemos el tablón de misiones. En él podremos acceder a múltiples misiones secundarias, de caza de un determinado monstruo o adquisición de un determinado material, además de encargos de los habitantes de la ciudad. Se van renovando y duran un determinado tiempo (los días van pasando en el juego con el transcurso de las horas y la alquimia consume tiempo de fabricación).

No todo es un camino de rosas…

Como todo, el título no es perfecto. El que para mí es el mayor escollo, es su falta de subtítulos en español. Y es que, si a un juego de nicho total le sumas unas voces en japonés y unos subtítulos en inglés, te estás cerrando mucho las puertas. Los fans del género están acostumbrados a este tipo de factores, pero sí es cierto que abre poco el abanico. El juego se entiende bien en su conjunto, pero se pueden escapar ciertos detalles. Y ésto, en un tipo de juego en el que prima la historia, es un fallo importante.

Otro fallo sería, como hemos comentado anteriormente, su motor gráfico. Sí, cumple, pero es un juego de actual generación que bien podría haber salido hace 10 años. Aun así, es vistoso y dinámico.

Hemos echado de menos también la «falta de tutoriales«. Los hay, sí, pero solo la primera vez que te los explican. Cuando accedes a la enciclopedia del menú te cuenta detalles sobre los monstruos, ciudades… pero no tienes un apartado de tutoriales pasados para recordar algo que se te haya podido pasar. Esto no cuesta mucho realmente y es algo muy importante, más en este tipo de juego.

En conclusión

El juego está realmente bien, aunque de nuevo, para el público al que va enfocado. Si os gusta el género JRPG y buscáis un nuevo título, no lo dudéis. En cambio, si sois nuevos, os recomendaría que no empezaseis con un título tan «purista» o aborreceréis el género.

La duración del título es la normal en este tipo de género, pudiendo llevarnos unas 50 horas fácil en completarlo. Si ya queréis descubrir todo, el horizonte es el límite.

Los personajes son carismáticos, aunque algo exagerados y estrambóticos, y se les coge cariño. Nos gustará su compañía y la historia enganchará, más aún cuando el juego avance. Ya sabéis que estos juegos tardan unas 8 horas en arrancar de verdad.

Hemos podido elaborar este análisis gracias a una copia digital para PlayStation 4 que nos ha proporcionado Koch Media.