Tras unas negociaciones fallidas, los actores de doblaje de Madrid se mantienen en huelga, situación en la que llevan más de un mes. Junto con LOCUMAD (Sindicato de locutores), UGT, CCOO, los trabajadores exigen la actualización de un convenio que ha permanecido inamovible desde 1993.
Los actores de doblaje de Madrid aseguran que la huelga se mantendrá hasta que se establezca un nuevo convenio colectivo
Como es lógico, esto afectará al doblaje de series y películas importadas, pero también tendrá graves repercusiones en el mundo del videojuego. De hecho, el presidente de Adoma -Adolfo Moreno- ha explicado que alguno de los videojuegos que tienen prevista su salida al mercado podría aplazar su fecha e incluso renunciar al doblaje español. No obstante, no ha concretado ninguna información más.
“Por supuesto. Todos los videojuegos se pueden ver afectados por la huelga de actores de doblaje”, ha asegurado Eduardo Bosch, doblador de juegos como Horizon: Zero Dawn.
Sin embargo, Boch cree que los lanzamientos no se verán retrasados. “Si están haciendo un videojuego y llega la fecha de entrega, pues probablemente hayan mandado el doblaje a otra persona que tenga un estudio en su casa”, se resigna.
El convenio que hace que los actores de doblaje de Madrid estén en huelga
Los actores de doblaje de Madrid luchan por cambiar un convenio que se remonta a 1982. Si bien es cierto que en el año 1993 lograron algunas mejoras -gracias a una huelga que duró 300 días-, aseguran que estas no son suficientes. “Bajamos el 25% [de los precios] del convenio por el cual peleábamos por mejorar”, ha confesado Boch. Por su parte, Moreno ha explicado que «no hay otra salida que convocar una huelga para cambiar esta situación precaria».
En el caso de los videojuegos, la situación no ha hecho más que empeorar. Lucas Baker, doblador de Resident Evil VII contó que por un protagonista de videojuego no cobra más de 300 euros cuando antes esta cifra alcanzaba fácilmente los 3.000.
«Ahora puedo cobrar 300 porque entró gente que no era profesional (fandubers). Este tipo de gente se ofreció diciendo ‘yo me ofrezco por lo que me pagues’, ha argumentado Baker.
