Desde PureGaming nos gusta mucho apoyar el mercado de videojuegos en España. Muchos estudios de desarrollo de nuestro país están trabajando muy duro para sacar adelante sus proyectos. Los que tenemos la oportunidad de trabajar en un medio de comunicación de videojuegos, podemos apoyar todas estas propuestas para impulsar su producción.
Hace varias semanas, nos contactó el estudio SVC Games. Una desarrolladora independiente de Madrid que ha estado a cargo del juego Debris Infinity, título que tenemos hoy entre manos para analizar. El juego llegó al mercado el pasado año 2017. Únicamente en Steam y desde el mes de octubre se encuentra disponible también en Nintendo Switch. A través de la Nintendo eShop. Aprovechando esta última versión para la consola híbrida de Nintendo. Hemos probado el juego y sus diferentes características, y vamos a analizarlas una por una.
¡Sobrevive en el espacio!
Debris Infinity podría encajar perfectamente dentro de la categoría de los juegos de acción. Pondrá a prueba nuestros reflejos con un sistema de juego que recuerda al de los míticos Asteroids de Atari. La mecánica principal de Debris Infinity, se basa en dirigir una nave desde una perspectiva cenital. Con la que tendremos que destruir todo lo que encontremos a nuestro alrededor, dentro de unos límites marcados. Como si de un Battle Royale contra asteroides y naves enemigas se tratara, nuestro principal objetivo será el de sobrevivir el mayor tiempo posible en el espacio exterior.
En este sentido, Debris Infinity desarrolla su potencial a lo largo de tres modos de juego distintos: Time Attack, Modo Normal y Power Wave. El primero de ellos consiste en conseguir la máxima puntuación en un tiempo limitado. Tendremos tres minutos para conseguir la máxima puntuación posible. Lógicamente, cada vez que destruyamos una nave o un asteroide, recibiremos puntos que se irán añadiendo a nuestro marcador. Marcador que podremos incrementar si realizamos combos de destrucción de enemigos, o realizamos cadenas de bajas. Tras leer esto, podéis pensar que es un modo de juego bastante sencillo, pero no lo es en absoluto.
Conforme el reloj se va acercando a cero, aparecerán cada vez más elementos en la pantalla, que tendremos que destruir, y que se dirigirán hacia nuestra nave sin ningún tipo de mesura ni control. Cada vez que consigan golpearnos, además de causarnos daño y debilitar nuestro escudo, también iremos perdiendo puntos. De hecho, durante mis primeras partidas he llegado a tener el marcador en negativo.
El modo normal, como su propio nombre indica, es el modo principal de Debris Infinity. Nuestro objetivo también será el de conseguir la máxima puntuación. Pero en este caso el tiempo no supondrá un problema para nosotros. Tendremos que valernos de nuestros reflejos, nuestra agilidad, y sobre todo de nuestra paciencia para poder erradicar todas las naves enemigas. Así como confiar en nuestra capacidad para esquivar y destruir todos los asteroides. En este caso, cada vez que consigan golpearnos, nuestro escudo se verá reducido y la partida acabará una vez que logren destruirlo. Un inconveniente que he encontrado en este modo, como opinión personal, es que cuesta mucho regenerar el escudo cada vez que nos golpean, por lo que será muy complicado sobrevivir.
Por último, nos encontramos con el modo Power Wave. Un modo cuya mecánica principal consistirá en sobrevivir a diferentes oleadas de enemigos. Como es lógico, conforme vayamos avanzando, las oleadas serán cada vez más y más complicadas. Al igual que en el modo normal, también tendremos la oportunidad de recuperar nuestro escudo en algunas ocasiones, pero la alta dificultad seguirá siendo un handicap bastante importante.
Compartir es vivir
Como veis, Debris Infinity no ofrece a los jugadores una experiencia de juego sencilla. Los tres modos de juego pondrán a prueba nuestra paciencia y sobre todo nuestros reflejos. Tendremos que ser muy rápidos con los controles si queremos tener una mínima posibilidad de supervivencia. Además de estos tres modos principales para un jugador, el juego de SVC Games también podrá ser disfrutado por dos jugadores. En el caso de Nintendo Switch, cada jugador tendrá que utilizar un Joy-Con. En este sentido, nos encontramos con dos modalidades para el juego compartido: una cooperativa y una competitiva.
El modo cooperativo que ofrece Debris Infinity para dos jugadores, busca la compenetración de los mismos. Uno de los jugadores controlará el movimiento y la dirección de la nave. El otro jugador se encargará de los disparos. Sin duda alguna, este modo supone todo un reto para la sincronización entre las dos personas que se enfrenten a la IA de Debris Infinity, y tengo que reconocer que cuesta acostumbrarse al esquema de controles en un primer momento, no por su combinación de botones, sino por el hecho de ponerte de acuerdo con tu compañero. Unas partidas después, se comienza a disfrutar y os advierto que hasta nos ha llegado a enganchar.
La otra modalidad para dos jugadores resulta ser competitiva. Pero no es un modo clásico de un jugador contra el otro. En este caso, los dos jugadores controlarán naves diferentes, pero no se podrán hacer daño el uno al otro. Como en el resto de modos, el objetivo será sobrevivir. En este caso ganará el jugador que consiga mantenerse en pie durante más tiempo, o el que más puntos realice destruyendo enemigos. Hubiera estado bien tener la oportunidad de poder hacer daño a nuestro rival para reducir sus escudos, pues no solo tendríamos que luchar contra la IA y los asteroides, sino que también podríamos luchar contra nuestros amigos.
Control sencillo y preciso
En relación a la jugabilidad que ofrece Debris Infinity, debo resaltar el sencillo esquema de control que tenemos sobre la nave en el modo para un jugador. En el caso de Nintendo Switch, con el joystick izquierdo del Joy-con controlamos el movimiento y con el derecho disparamos. Tendremos un ángulo completo de 360 grados para atacar a nuestros enemigos, ofreciendo así una amplia libertad para disparar. Este factor me parece lógico, pues hay momentos en los que tendremos que disparar en todas direcciones, pues la pantalla estará repleta de elementos a destruir. A la hora de desplazarnos por el escenario nos encontramos unos márgenes que limitarán nuestro movimiento, como si de un cuadrilátero de lucha libre se tratase. Gracias a esto, se pierde la esencia clásico del juego Asteroids que comentábamos anteriormente, reduciendo el espacio a un tamaño bastante reducido, algo que sin duda, potencia la dificultad del título.
Durante las partidas, podremos conseguir modificadores temporales en el disparo. Si somos capaces de eliminar a los enemigos en el menor tiempo posible. De esta manera, podremos obtener diferentes tipos de ataque como por ejemplo un disparo rápido, un cañón laser o un disparo de energía. Esto facilitará acabar con todos los elementos de la pantalla, aunque sea por un tiempo limitado.
Al igual que tendremos estos modificadores, nuestra nave cuenta con dos habilidades especiales. La primera de ellas consiste en ralentizar el tiempo. Bonificación que nos ayudará mucho a la hora de esquivar a los enemigos cuando nos tienen acorralados. Por otro lado, hay una habilidad especial que sirve para destruir todo lo que haya en la pantalla. Estas dos habilidades, consumirán nuestra barra de energía, la cual se encuentra alrededor de la nave (junto a la salud/escudo). Para recuperarla, los jugadores tendremos que eliminar enemigos del mismo color de forma consecutiva.
El apartado gráfico de Debris Infinity es muy sencillo pero sorprendentemente colorido. Entra por los ojos, y cada explosión es un estallido de color muy agradable para la vista. El apartado sonoro también respira muchísima calidad. Con unas pistas musicales electrónicas que van de la mano de la esencia del título, así como los efectos de sonido y las voces, que recuerdan muchísimo a los ambientes de los salones recreativos de los años 80. ¡Un gran trabajo de recreación!
Entrenido y adictivo pero…
Me gustaría destacar que el juego podría mejorar su experiencia jugable si tuviera algunas características en su base. Por ejemplo, estaría bien tener la oportunidad de recoger bonificadores y algún tipo de regeneración de escudo si aparecen aleatoriamente en la zona de juego. Así los jugadores tendríamos más oportunidades de sobrevivir y al menos una ayuda para aguantar más tiempo con vida. Como he destacado, la dificultad del juego es alta, y muchas veces las partidas tienen una duración muy corta.
Por otro lado, y a pesar de que tenemos tres modos de juego, no se aprecia mucha diferencia entre ellos. El sistema jugable es el mismo y el objetivo de todas las partidas es el de sobrevivir. Estaría bien completar otro tipo de misiones, por ejemplo, uno que cuente con un sistema progresivo de niveles, en el que al final tengamos que luchar contra un boss final o similar.
Debris Infinity cumple el propósito de entretener a todo el que lo juegue, y también llega a ser un título adictivo. Aun así, tiene que mejorar ciertos parámetros, en mi opinión, que podrían agrandar su experiencia jugable. Echo de menos más variedad de opciones jugables, así como una mayor libertad en el movimiento de la nave. Incluso se podría añadir un sistema de elección de dificultad. Para que los usuarios menos acostumbrados a este tipo de juegos lo puedan disfrutar desde el principio. Es un título perfecto para recordar el mítico Asteroids y juegos por el estilo. Presenta una buena base, que como he dicho, mejoraría con ciertas actualizaciones. Cumple con su cometido, pero no entusiasma.
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- Análisis, Analisis Videojuegos, Nintendo Switch
- 20 diciembre, 2018
- Debris Infinity6.5Valoración Final
Debris Infinity es una propuesta indie de SVC Games, una desarrolladora española. Esta propuesta de acción está disponible por el momento para PC y Nintendo Switch y llega preparada para poner a prueba los reflejos y la velocidad de todos los jugadores que se atrevan a probarlo. Tiene tres modos de juego y además incorpora una propuesta cooperativa para disfrutar con otra persona. Cumple su propósito pero necesita mejorar algunos de sus apartados. Recomendado para pasar el rato.
- Jugabilidad
- Gráficos
- Sonido
- DESTACAMOS
- Es realmente adictivo.
- Visualmente es un juego muy atractivo.
- La posibilidad de poder jugar con un amigo.
- A MEJORAR
- Necesita más modos de juego.
- No podemos elegir su dificultad.
- El limitado espacio de juego.