Pillars of Eternity – Review

Vamos a analizar el nuevo juego de rol para PC, Pillars of Eternity. Que conste que antes de hacer esta review, había puesto el listón realmente alto, primero por el estudio encargado del juego, Obsidian, y segundo porque bebía de los grandes clásicos con los que jugué durante cientos de horas de mi adolescencia: Baldur´s gate y Icewind Dale. Y tras esta breve introducción, y ya una veintena de horas de juego, tengo que decir que el título cumple todo lo que prometía y más…

El juego, esta inspirado en los clásicos, pero cumple con todos los requisitos para convertirse en uno y añadirlo a esa famosa lista de imprescindibles que los amantes del rol tenemos y que pocos títulos llegan a ocupar un lugar destacado. Es sin duda, un juego sobresaliente, que podremos comprar en edición física gracias a la distribuidora Meridiem Games, para añadirlo a nuestra colección. Y aunque otros títulos han intentado traernos esa nostalgia de los grandes clásicos, con Pillars of Eternity  podemos afirmar que no sólo lo ha conseguido, sino que el mejor rol para PC ha vuelto en estado puro.

Empezamos…

Vamos a empezar por algo imprescindible en un juego de rol, el idioma. El juego se encuentra traducido al castellano, pero no doblado. Algo que desde mi punto de vista no lo veo ni un error ni un acierto. Personalmente, me encanta la localización a su idioma nativo y además, la traducción es perfecta. Por lo que aquí respecta, ninguna pega. Podremos disfrutar de la historia a la perfección.

La historia

Dicho esto, la historia. Compleja, absorvente, con multitud de opciones y la posibilidad de escoger diferentes caminos. No quiero meterme a analizar este punto en profundidad, porque siempre he pensado que en un juego de rol, es el punto más importante…

Y ya puede tener los mejores gráficos o la mejor jugabilidad, pero si la historia es mala, no hay quién lo juegue. No es el caso de  Pillars of Eternity. Para este juego, Obsidian ha creado un mundo fantástico, con diferentes razas, criaturas, fauna, flora y mitología… Todo ello bien estructurado y con una buena historia de fondo que hace que el jugador se sumerja en la la aventura y se involucre en el mundo de fantasía que este genial estudio ha creado una vez más.

Además tiene una forma de narrar la historia muy interesante, ya que en determinados momentos, el juego hará unas pausas y relatará la historia de una forma narrativa, como si de un libro se tratase. Pero lo llamativo en este punto, es que el jugador tiene la capacidad de elegir diferentes opciones en determinados momentos. Esta forma de contar la historia y permitirnos interacturar con ella me ha encantado.

Es cierto que al jugador le pueda chocar que no tenga secuencias de vídeo de gran factura gráfica como otros juegos de rol… Pero si esta bebiendo de lo clásicos y si su objetivo es sumergirnos en la historia, ¿quién las necesita?

Una vez que damos a comenzar la aventura, empezamos a diseñar nuestro personaje con un completo editor. Que nos permite seleccionar sexo, apariencia, raza, clase, tipo, habilidades… Editor que podremos utilizar no sólo con nuestro personaje principal. Sino con otros que podremos añadir a nuestro grupo al contratarlos en la taberna. De esta forma tenemos la posibilidad de componer un grupo de aventureros a nuestro gusto. Como ya sucedía en Icewind Dale, pero a su vez, siempre podemos añadir compañeros que nos encontraremos en nuestra aventura. Que están integrados en la historia, cada uno con su propio trasfondo y carisma. Y que se relacionarán con nosotros y nos sorprenderán.

Estas relaciones personales es un punto sobresaliente que aporta el título y que muchas veces. Están supeditadas a un sistema de reputación que tiene el juego. Este sistema hace que entre los personajes que nos acompañan, se establezcan relaciones de odio, envidia o admiración.

El nivel gráfico es completamente fiel a los clásicos. No son gráficos de última generación, pero tampoco es lo que busca el juego. El diseño de los personajes y los escenarios está bien logrado, siendo su acabado más que notable.

Con respecto a su jugabilidad:

Sobresaliente. Los combates son en tiempo real, y como ya sucedía en Baldur´s Gate o Icewind Dale. Podemos pausar la batalla para lanzar nuestros ataques especiales o hechizos… O simplemente para elaborar bien la estrategia contra nuestros adversarios. Habrá multitud de diálogos y multitud de opciones para elegir. Sin duda, un apartado sobresaliente.

Los menús son intuitivos y sencillos. Todo está claro y bien explicado, desde los menús principales del juego. Hasta los de equipamiento de nuestros personajes o los de pantalla.

La dificultad la consideraría como media-alta. No es el RPG más difícil que he jugado, pero no es sencillo. Habrá eso sí, algún momento un poco desesperante… Como debe ser.

Y por último, la banda sonora. Magistral. Acompaña a la perfección la aventura, con música épica que abarca desde dulces melodías hasta una música de tensión que atrapa y nos sumerge más si cabe en este fantástico mundo.

Conclusión

Un RPG que ha sabido seleccionar todo lo bueno de las grandes joyas clásicas. Mejorarlo y construir una aventura fantástica, de bella factura técnica y profunda historia. Que atrapará al jugador y hará que se sumerja en un mundo de fantasía repleto de peligros, enemigos y mazmorras… del que no querrá salir.

Imprescindible.